Fernando Alonso no pudo subir al podio en el Gran Premio de Australia de Fórmula 1, primera prueba de la temporada, pero estuvo cerca de hacerse un hueco entre los tres primeros después de protagonizar una gran carrera en Albert Park.
Sebastian Vettel confirmó su favoritismo en la prueba y se hizo con la victoria incontestable por delante de un Lewis Hamilton que llegó con el fondo plano de su McLaren muy tocado, mientras que Vitaly Petrov dio la sorpresa con su formidable Renault y se alzó con la tercera plaza, aunque tuvo que sufrir en los instantes finales de la carrera para que Alonso no se la arrebatara.
Mala salida de Alonso: "Estaba en el lugar equivocado"
Una salida complica marcó de inicio la carrera del asturiano de Ferrari que, pese a salir de inicio desde la tercera fila -quinto-, se vio obligado a maniobrar para no chocar con Button y Petrov, entre los que se encontraba en parrilla, en plena lucha por la parte derecha de la pista. Fernando se fue hasta la novena posición tras la primera curva y, pese a que adelantó sin problemas al Sauber de Kobayashi y al MercedesGP de Rosberg, la séptima posición le obligaba a ponerse en el papel del Alonso de las grandes remontadas.
Mientras, por delante, el 'poleman' Sebastian Vettel no tenía problemas en conservar la primera posición y salía 'como Pedro por su casa', viendo por el espejo retrovisor como su compañero Mark Webber luchaba por arrebatarle a Hamilton la segunda plaza. Pero el inglés de McLaren se defendió a la perfección, logrando junto a Vettel alejarse del tráfico que les venía a la zaga.
Por detrás, el interés se centraba en la pelea entre Massa y Button por el quinto puesto. El brasileño tapó muy bien los huecos ante los ataques de su rival inglés y de esa batalla se benefició Alonso, que observaba justo por detrás lo que estaba pasando entre su compañero y Jenson mientras comenzaba a probar la efectividad del nuevo alerón trasero móvil.
Esa lucha entre Ferrari-McLaren acabó cuando Button se saltó una chicane para superar a Massa. Alonso, más rápido que su compañero, aprovechó para superarle, sabedores en Ferrari de que la acción de Button debía ser sancionada porque no había adelantado de forma legal. La dirección de carrera tardó en decidirse, pero finalmente el inglés fue sancionado con un 'drive-through' por lo ocurrido.
La carrera avanzaba y los grandes protagonistas, que en este arranque de Mundial eran, más que los pilotos, los nuevos neumáticos Pirelli y su rápida degradación, empezaban a centrar la atención en los equipos. ¿Dos o tres paradas? Era complicado vaticinar la estrategia que llevaban en las escuderías en una mañana de domingo en Melbourne en las que las temperaturas eran más altas que en los días anteriores.
El juego de las estrategias
De nuevo las estrategias en juego. Un segundo paso de Webber por boxes confirmaba que el australiano iba a ir a tres paradas, aunque no parecía que esa fuera la tendencia a seguir por su compañero. Petrov se aprovechó del magnífico rendimiento de su Renault -no sabemos qué habría hecho Kubica con este coche- para unirse al grupo de pilotos que iba a luchar por el podio yendo a dos paradas: Vettel, Hamilton y el propio piloto ruso.
Así pues, a Alonso no le quedaba otra que pelear con Webber por la cuarta posición. Estaba claro que la estrategia a dos paradas, aunque arriesgada porque no se sabía cómo iban a responder los neumáticos, se convertía en la acertada en Albert Park... El australiano quiso defenderse de Fernando parando una vuelta antes, pero un error del piloto del Red Bull nada más salir de boxes en la primera urva, con los neumáticos nuevos, fue aprovechado en Ferrari de manera magistral para adelantar el cambio de ruedas del asturiano.
Siendo cuarto a falta de ocho vueltas, Alonso todavía confiaba en que las gomas de Petrov no aguantaran y poder así darle caza. Y a punto estuvo de hacerlo. Fernando hizo sufrir al ruso hasta el final y, de haber durado unas vueltas más la carrera, de seguro le hubiera alcanzado.
Jaime Alguersuari, que tuvo un toque en la salida que le obligó a pasar por boxes a las primeras de cambio, quedó apartado de inicio de la lucha por los puntos y hubo de conformarse con la decimotercero posición mientras que su compañero en Toro Rosso Sebastian Buemi fue décimo*.
A destacar el buen papel del Sergio 'Checo' Pérez en su debut con Sauber, quien acabó séptimo tras una fabulosa carrera de estreno en la que fue el único piloto capaz de exprimir al máximo los Pirelli con una sóla parada.
La mala noticia para el mexicano y para su compañero de equipo, Kabui Kobayashi, que había llegado justo por detrás (octavo), llegó después. La FIA decidió excluir a ambos pilotos de la prueba por no cumplir el alerón trasero de su monoplaza las medidas exigidas por el reglamento.
Sebastian Vettel confirmó su favoritismo en la prueba y se hizo con la victoria incontestable por delante de un Lewis Hamilton que llegó con el fondo plano de su McLaren muy tocado, mientras que Vitaly Petrov dio la sorpresa con su formidable Renault y se alzó con la tercera plaza, aunque tuvo que sufrir en los instantes finales de la carrera para que Alonso no se la arrebatara.
Mala salida de Alonso: "Estaba en el lugar equivocado"
Una salida complica marcó de inicio la carrera del asturiano de Ferrari que, pese a salir de inicio desde la tercera fila -quinto-, se vio obligado a maniobrar para no chocar con Button y Petrov, entre los que se encontraba en parrilla, en plena lucha por la parte derecha de la pista. Fernando se fue hasta la novena posición tras la primera curva y, pese a que adelantó sin problemas al Sauber de Kobayashi y al MercedesGP de Rosberg, la séptima posición le obligaba a ponerse en el papel del Alonso de las grandes remontadas.
Mientras, por delante, el 'poleman' Sebastian Vettel no tenía problemas en conservar la primera posición y salía 'como Pedro por su casa', viendo por el espejo retrovisor como su compañero Mark Webber luchaba por arrebatarle a Hamilton la segunda plaza. Pero el inglés de McLaren se defendió a la perfección, logrando junto a Vettel alejarse del tráfico que les venía a la zaga.
Por detrás, el interés se centraba en la pelea entre Massa y Button por el quinto puesto. El brasileño tapó muy bien los huecos ante los ataques de su rival inglés y de esa batalla se benefició Alonso, que observaba justo por detrás lo que estaba pasando entre su compañero y Jenson mientras comenzaba a probar la efectividad del nuevo alerón trasero móvil.
Esa lucha entre Ferrari-McLaren acabó cuando Button se saltó una chicane para superar a Massa. Alonso, más rápido que su compañero, aprovechó para superarle, sabedores en Ferrari de que la acción de Button debía ser sancionada porque no había adelantado de forma legal. La dirección de carrera tardó en decidirse, pero finalmente el inglés fue sancionado con un 'drive-through' por lo ocurrido.
La carrera avanzaba y los grandes protagonistas, que en este arranque de Mundial eran, más que los pilotos, los nuevos neumáticos Pirelli y su rápida degradación, empezaban a centrar la atención en los equipos. ¿Dos o tres paradas? Era complicado vaticinar la estrategia que llevaban en las escuderías en una mañana de domingo en Melbourne en las que las temperaturas eran más altas que en los días anteriores.
Tras el primer 'baile' de pilotos por boxes, Alonso quedó emplazado quinto, por detrás del Renault de Petrov en lo que parecía que iba a ser la reedición de los ocurrido en Abu Dabi 2010, cuando el coche del ruso se convirtió en la pesadilla con la que el asturiano acabó teniendo pesadillas.
Cuando aún no se había llegado al ecuador de la carrera, Schumacher, con problemas desde la salida -"alguien me tocó por detrás"-, abandonaba. Su monoplaza no daba para más y el Káiser se bajaba del coche decepcionado por haber empezado la temporada como acabó la anterior: decepcionando a todos esos fans que esperaban verle en lo más alto de nuevo. Poco después, Barrichello se llevaba por delante precisamente al compañero de Michael, a Nico Rosberg, en un choque donde el peor parado fue el MercedesGP del alemán, que ni siqueira llegó a boxes. Mal día para el equipo de Ross Brawn.El juego de las estrategias
De nuevo las estrategias en juego. Un segundo paso de Webber por boxes confirmaba que el australiano iba a ir a tres paradas, aunque no parecía que esa fuera la tendencia a seguir por su compañero. Petrov se aprovechó del magnífico rendimiento de su Renault -no sabemos qué habría hecho Kubica con este coche- para unirse al grupo de pilotos que iba a luchar por el podio yendo a dos paradas: Vettel, Hamilton y el propio piloto ruso.
Así pues, a Alonso no le quedaba otra que pelear con Webber por la cuarta posición. Estaba claro que la estrategia a dos paradas, aunque arriesgada porque no se sabía cómo iban a responder los neumáticos, se convertía en la acertada en Albert Park... El australiano quiso defenderse de Fernando parando una vuelta antes, pero un error del piloto del Red Bull nada más salir de boxes en la primera urva, con los neumáticos nuevos, fue aprovechado en Ferrari de manera magistral para adelantar el cambio de ruedas del asturiano.
Siendo cuarto a falta de ocho vueltas, Alonso todavía confiaba en que las gomas de Petrov no aguantaran y poder así darle caza. Y a punto estuvo de hacerlo. Fernando hizo sufrir al ruso hasta el final y, de haber durado unas vueltas más la carrera, de seguro le hubiera alcanzado.
Jaime Alguersuari, que tuvo un toque en la salida que le obligó a pasar por boxes a las primeras de cambio, quedó apartado de inicio de la lucha por los puntos y hubo de conformarse con la decimotercero posición mientras que su compañero en Toro Rosso Sebastian Buemi fue décimo*.
A destacar el buen papel del Sergio 'Checo' Pérez en su debut con Sauber, quien acabó séptimo tras una fabulosa carrera de estreno en la que fue el único piloto capaz de exprimir al máximo los Pirelli con una sóla parada.
La mala noticia para el mexicano y para su compañero de equipo, Kabui Kobayashi, que había llegado justo por detrás (octavo), llegó después. La FIA decidió excluir a ambos pilotos de la prueba por no cumplir el alerón trasero de su monoplaza las medidas exigidas por el reglamento.